Otitis del nadador (otitis externa)

¿Se puede prevenir la otitis externa?

Ponerse gotas de una solución diluida de ácido acético o alcohol, de venta sin receta médica, en los oídos después de nadar puede ayudar a prevenir la otitis externa, sobre todo en los niños propensos a contraer este tipo de infecciones. Estas gotas se pueden comprar en farmacias y droguerías, pero solo se pueden usar en niños que no tengan tubos de drenaje en los oídos ni el tímpano perforado.

Para evitar dañar los oídos, los niños no se deben limpiar los oídos. Además, no introduzca ningún objeto, como un bastoncillo de algodón, dentro del oído de su hijo, ni permita que se lo introduzca él. 

¿Cómo se trata la otitis externa?

El tratamiento de la otitis externa depende de la gravedad de la infección y de lo dolorosa que le resulte al niño. Un profesional de la salud le puede recetar gotas para los oídos que contengan antibióticos para combatir la infección, tal vez junto con esteroides, para reducir la inflamación del conducto auditivo. Las gotas para los oídos se administran varias veces al día, durante 7 a 10 días. 

Si la inflamación del conducto auditivo hace difícil la administración de las gotas, es posible que el médico inserte una mecha de drenaje en el conducto auditivo para que el medicamento entre mejor en el oído. En algunos casos, el médico tendrá que extraer el pus y demás partículas que se hayan acumulado dentro en el oído, succionándolas o aspirándolas. Esto permitirá que las gotas funcionen mejor. 

En las infecciones más graves, también se pueden recetar antibióticos por vía oral (por boca), y es posible que el médico quiera hacer un cultivo de la supuración del oído con el fin de identificar la bacteria o el hongo que está causando la infección.

Se pueden utilizar medicamentos para el dolor de venta sin receta médica pero, si el dolor es muy intenso, es posible que sea necesario administrar un medicamento de venta con receta médica. Una vez que se inicia el tratamiento, su hijo empezará a encontrase mejor al cabo de uno o dos días. La otitis externa se suele curar al cabo de unos 7 a 10 días desde el inicio del tratamiento.

¿Cómo puedo ayudar a mi hijo a sentirse mejor?

Las infecciones de oído deben ser tratadas por los médicos. Si una otitis no se trata, el dolor de oídos empeorará y es posible que la infección se extienda. En casa, el paracetamol o el ibuprofeno pueden aliviar el dolor.

Siga las instrucciones del profesional de la salud que atiende a su hijo sobre las gotas para los oídos y los antibióticos por vía oral, en el caso de que se los hayan recetado. Es importante que a su hijo no le entre agua en los oídos durante el curso completo del tratamiento. Puede usar bolitas de algodón como tapones para los oídos a fin de evitar que le entre agua en los oídos cuando su hijo se bañe o se duche.  

¿Cuándo debería llamar al médico?

Llame al médico de inmediato si su hijo presenta alguno de los siguientes síntomas: dolor de oído con o sin fiebre, reducción de la audición en uno o ambos oídos o una supuración anormal en uno u ambos oídos.