Get information about COVID-19 vaccinations, testing and visiting standards. Learn More.

Patient & Family Education Materials

Start over with a New Search

Radiografía: pie

Article Translations: (English)

Qué es

La radiografía de pie es un estudio seguro e indoloro en el que se utiliza una pequeña cantidad de radiación para obtener una imagen del pie del paciente. Durante el estudio, un equipo de rayos X envía un haz de radiación a través del pie y la imagen se registra en una película especial para radiografías o en una computadora. La imagen muestra los tejidos blandos y los huesos del pie, lo cual incluye los huesos tarsianos (huesos del tobillo), los huesos metatarsianos (extremo delantero del pie) y las falanges (dedos del pie).

Las imágenes de rayos X son en blanco y negro. Las estructuras densas del organismo, que bloquean el paso del haz de rayos X a través del organismo, como los huesos, se ven de color blanco. Los tejidos más blandos, como los músculos, permiten que el haz de rayos X los atraviese y se ven de un color más oscuro.

El encargado de realizar la radiografía es el radiólogo del departamento de radiología de un hospital o un consultorio de atención médica. En general, se toman tres imágenes diferentes del pie: una desde el frente (vista anteroposterior), una desde el costado (vista lateral) y otra en un ángulo determinado (vista oblicua).

Por qué se realiza

Las radiografías del pie pueden ayudar a detectar la causa de síntomas como dolor, sensibilidad, hinchazón o deformidades. Permiten detectar huesos rotos o articulaciones dislocadas. Una vez que se ha acomodado un hueso roto, la radiografía puede ayudar a determinar si los huesos están correctamente alineados y si se han curado correctamente.

Si es necesario realizar una cirugía, es posible tomar una radiografía para planificar la cirugía y evaluar los resultados de la operación. Además, las radiografías pueden ayudar a detectar quistes, tumores e infecciones avanzadas en los huesos.

Preparación

No es necesario realizar ninguna preparación especial para las radiografías del pie. Su hijo tendrá que quitarse la ropa (incluidos los zapatos), las alhajas o los objetos metálicos que puedan interferir con la imagen.

Si cree que su hija está embarazada, es importante que se lo comunique al técnico radiólogo o al médico. En general, se evita la realización de radiografías durante el embarazo porque hay una pequeña probabilidad de que la radiación dañe al bebé en desarrollo. Pero si la radiografía es indispensable, es posible tomar precauciones para proteger al feto.

Procedimiento

Si bien el procedimiento puede llevar aproximadamente 15 minutos o más, la exposición real a la radiación suele ser de menos de un segundo.

Su hijo tendrá que entrar en una sala especial que probablemente tendrá una camilla y una gran máquina de rayos X colgando del techo. Se suele permitir que los padres entren en la sala con el niño para tranquilizarlo. Si permanece en la sala durante la realización de la radiografía, tendrá que usar un delantal de plomo para proteger algunas partes del cuerpo. Los órganos reproductivos de su hijo se protegerán con una placa de plomo.

El técnico colocará al niño en la posición adecuada, ya sea sobre la camilla o fuera de ella, y después se parará detrás de una pared o en la sala contigua para hacer funcionar la máquina. En general, se suelen tomar tres radiografías (desde el frente, el costado y en ángulo); por lo tanto, el técnico tendrá que volver a entrar en la sala para acomodar el pie en la posición necesaria para cada radiografía. En algunos casos, los médicos piden una radiografía del otro pie para poder compararlos.

Los niños mayores deberán quedarse quietos durante unos segundos mientras se toma la radiografía. En el caso de bebés, es posible que sea necesario sujetarlos suavemente. Es muy importante que el paciente deje el pie quieto para evitar que la imagen de la radiografía salga borrosa.

Qué esperar

Su hijo no sentirá nada mientras le realizan la radiografía. Tal vez, la sala de rayos esté fría porque se utiliza aire acondicionado para mantener el equipo.

Es posible que las posiciones para las radiografías resulten incómodas, pero sólo es por unos segundos. Si su hijo está lesionado y no puede permanecer en la posición necesaria, quizás el técnico pueda encontrar una posición más cómoda para su hijo. Los bebés suelen llorar en la sala de rayos X, en especial si están sujetos, pero esto no interfiere con el procedimiento.

Una vez tomadas las radiografías, usted y su hijo tendrán que esperar unos minutos mientras procesan las imágenes. Si están borrosas o no son claras, tal vez sea necesario repetir la radiografía.

Obtención de los resultados

El radiólogo, un médico con capacitación especial para interpretar las imágenes de las radiografías, mirará las de su hijo y le enviará un informe al médico, quien conversará sobre los resultados con usted y le explicará su significado.

En una emergencia, los resultados de las radiografías pueden estar listos rápidamente. De lo contrario, los resultados suelen estar listos en 1 ó 2 días. En la mayoría de los casos, los resultados no se pueden entregar directamente al paciente o a la familia en el momento del examen.

Riesgos

En general, las radiografías son muy seguras. Si bien existe un riesgo mínimo para el cuerpo por la exposición a la radiación, la cantidad de radiación que se utiliza en las radiografías del pie no se considera peligrosa. Los radiólogos utilizan la cantidad mínima de radiación necesaria para obtener los mejores resultados.

Los bebés en desarrollo son más sensibles a la radiación; por lo tanto, si su hija está embarazada, asegúrese de comunicárselo al técnico radiólogo y al médico.

Ayudar a su hijo

Puede ayudar a su hijo a prepararse para la radiografía de pie explicándole en qué consiste el examen en palabras sencillas antes del procedimiento. Seguramente lo ayudará si le explica que las radiografías son lo mismo que posar para una fotografía.

Puede describir la sala y el equipo que se utilizará y tranquilizar a su hijo explicándole que usted estará allí para acompañarlo. En el caso de los niños mayores, asegúrese de explicarles que es importante quedarse quietos cuando les toman la radiografía para que no sea necesario repetirla.

Si tiene alguna pregunta

Si tiene preguntas acerca de por qué es necesario realizar una radiografía de pie, hable con su médico. También puede hablar con el técnico encargado de realizar la radiografía antes del procedimiento.

Back To Top

Nota: Toda la informacion incluida en este material tiene propositos educacionales solamente. Si necesita servicios para diagnostico o tratamiento, tenga a bien consultar con su medico de cabecera.

© 1995-2024 KidsHealth ® Todos los derechos reservados. Imagenes proporcionadas por iStock, Getty Images, Corbis, Veer, Science Photo Library, Science Source Images, Shutterstock, y Clipart.com