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Los repelentes de insectos que contienen DEET (N,N-Dietil-meta-toluamida) se han puesto a prueba y se han aprobado como seguros para niños mayores de 2 meses de edad. Protegen contra los mosquitos, las garrapatas, los tábanos, los ácaros rojos y las pulgas.
Pero asegúrese de leer todas las etiquetas y de tener cuidado cuando los use:
Aplique un repelente que contenga DEET no más de una vez al día.
El DEET se puede aplicar en la piel expuesta al exterior, así como sobre la ropa, los calcetines y los zapatos. Pero no ponga repelente con DEET en la cara de su hijo, debajo de la ropa, sobre cortes o piel irritada ni en las manos de los niños pequeños.
Así mismo:
Hay otros tipos de repelentes de insectos que no contienen DEET. La Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos dispone de un listado aprobado de repelentes de insectos. Esta herramienta le puede ayudar a elegir un repelente de insectos adecuado para su familia.
Independientemente del repelente de insectos que usted escoja, siga siempre al pie de la letra sus instrucciones de uso.
Nota: Toda la informacion incluida en este material tiene propositos educacionales solamente. Si necesita servicios para diagnostico o tratamiento, tenga a bien consultar con su medico de cabecera.
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