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Renovar una receta médica

Elige tu mejor opción para renovar una receta

¿Incluyó tu médico renovaciones de tu medicación en la receta médica? Compruébalo en la etiqueta. Si en la etiqueta pone un número al lado de la sección de "renovaciones" (refills en inglés), esa es la cantidad de veces que puedes obtener más medicamentos sin tener que volver a visitar a tu médico.

Hay varias formas de renovar una receta:

  • En persona. Ve a la farmacia donde adquiriste el medicamento por primera vez, pide que te lo renueven y espera a que te lo den o bien pasa a recogerlo más tarde.
  • Por teléfono. Usa el número de teléfono de la farmacia que aparece en la etiqueta de tu medicamento y pide que te lo renueven. La mayoría de las farmacias grandes o cadenas de productos farmacéuticos disponen de menús automatizados que puedes consultar en cualquier momento, de día o de noche (aunque, por descontado, tendrás que pasar a recoger tu medicamento cuando estén abiertas al público). Las guías de voz te conducirán a través del proceso. En las farmacias más pequeñas, puedes hablar directamente con el farmacéutico o el técnico en farmacia. Ahora también te puedes bajar aplicaciones para teléfonos inteligentes a fin de adquirir medicamentos que te hayan recetado sin necesidad de llamar por teléfono.
  • Por internet. Si tu farmacia te permite pedir renovaciones de recetas por internet, es posible que sigas teniendo que ir a la farmacia a buscarlas.
  • Por correo ordinario. Las personas que toman medicamentos con regularidad (por ejemplo, a diario, para controlar una enfermedad crónica) a veces pueden renovar sus recetas usando el correo ordinario. Esta opción es cómoda porque sueles poder obtener tus medicamentos por lotes (por ejemplo, un suministro de pastillas contra la alergia para 3 meses) si tu médico te da una receta para esa cantidad. Pregúntale a tu médico sobre esta opción. Si optas por el correo ordinario, deberás planificarlo con tiempo de antelación porque podrías tardar en recibir tu medicamento hasta 2 semanas.

Si tu seguro médico te cubre las recetas, asegúrate de informar al personal de la farmacia por si tu seguro hubiera cambiado desde la última vez que recogiste tu medicamento. Si no estás seguro sobre el precio de tu medicamento o si hay copago, pregunta para no tener una sorpresa inesperada. Algunas pólizas de seguro médico tienen instrucciones específicas sobre cómo y dónde renovar las recetas.

Usa la etiqueta

Independientemente de cómo elijas renovar una receta, te resultará más fácil si tienes a mano toda la información de tu receta. Gran parte de lo que necesitas está impreso en la etiqueta.

La etiqueta de la receta suele estar colgada del frasco del medicamento. En algunos casos, sobre todo en medicamentos como los colirios y las cremas para la piel, puede estar pegada en el exterior de la caja. Revisa la caja cuando obtengas tu primer medicamento para no tirar la etiqueta por error.

¿Qué pasará si sabes que tu receta se puede renovar pero resulta que tiraste a la basura el frasco o la caja del medicamento? Puedes llamar o ir en persona a la farmacia en la que adquiriste el medicamento por primera vez y pedir que la busquen en su base de datos. Lo más probable es que te pidan tu documento oficial de identificación y que quieran ver tu carnet de medicación antes de renovarte la receta, de modo que asegúrate de llevarlos encima por si acaso.

Esta es la información que debes buscar en la etiqueta:

  • Teléfono de la farmacia. Este es el número al que llamarás para solicitar la renovación.
  • Número de la receta. Este número se suele encontrar en la etiqueta como "Rx#". Aunque un farmacéutico puede buscar tu receta en su computadora, el proceso de renovación será más rápido si tienes este número a mano, ya que se trata del código abreviado de tu receta.
  • Cantidad de renovaciones disponibles. La etiqueta de la receta te indicará cuántas renovaciones te quedan disponibles. La mayoría de las etiquetas muestran una cantidad de renovaciones junto a una fecha límite. Si renuevas tu receta antes de esa fecha, deberías poder hacer tu pedido sin ningún problema. Pero, si en la etiqueta pone algo como "Las renovaciones requieren autorización" (Refills require authorization, en inglés) o si tus renovaciones ya han caducado, deberás ponerte en contacto con el médico que te recetó el medicamento. A veces, la farmacia podrá obtener renovaciones directamente, pero habrá otras veces en que el médico querrá verte y hablar contigo antes de autorizar a la farmacia a renovar tu receta.

Asegúrate de que no se te agota el medicamento

Probablemente la parte más complicada de renovar recetas sea acordarse de controlar cuándo se te va a acabar el medicamento. Si esperas a tomarte la última pastilla para renovar tu receta y, por algún motivo, acabas teniendo que esperar para recibir el medicamento, podría ser solo una leve molestia o bien un verdadero problema. Saltarse solo una dosis diaria de algunos medicamentos puede ser peligroso.

Por otro lado, si tratas de adelantarte y pedir una renovación con varias semanas de antelación, es posible que tu seguro no lo cubra. Por lo tanto, está pendiente del frasco e intenta calcular el momento de renovar la receta para que la farmacia disponga de varios días para preparar el medicamento, sobre todo, si van a tener que ponerse en contacto con tu médico.

Habla con el farmacéutico

Cuando adquieras tu medicamento después de haber renovado tu receta, lo más probable es que te pregunten si quieres hacer alguna pregunta al farmacéutico. Este es un buen momento para revisar cómo debes tomar el medicamento, por ejemplo, si los debes tomar con o sin alimentos. Si no estás del todo seguro sobre el medicamento que estás tomando, solicita ver al farmacéutico. La mayoría de las farmacias piden que firmes una "exención de responsabilidades" si no tienes ninguna pregunta.

Puesto que ya llevas un tiempo tomando el medicamento, es posible que hayas notado algún efecto secundario. Por ejemplo, ¿la crema para el acné te deja la cara roja e irritada? ¿Tienes dolor de cabeza después de usar tu colirio (gotas para los ojos)? Es bueno que le comentes estas cosas a tu farmacéutico, sobre todo, porque a veces la gente nota efectos secundarios nuevos incluso después de llevar muchos años tomando el mismo medicamento.

Cuando recojas tu medicamento, informa a tu farmacéutico si estás tomando algún medicamento que no tomabas antes. Hasta los medicamentos de venta libre (como los medicamentos para el resfriado) o los suplementos elaborados con plantas medicinales pueden afectar a los efectos de los medicamentos de venta con recete médica o interactuar con ellos y causar problemas de salud.

Si parece que en la farmacia están ocupados o si no quieres hacer preguntas sobre algo personal (como los anticonceptivos) delante de otras personas, puedes llamar a la farmacia y pedir hablar con el farmacéutico. Dile que acabas de renovar tu receta allí y que tienes preguntas. Por muy ocupados que estén, los farmacéuticos siempre están dispuestos a ayudar: su trabajo consiste en asegurarse de que la gente tome sus medicamentos de una forma segura y eficaz.

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Nota: Toda la informacion incluida en este material tiene propositos educacionales solamente. Si necesita servicios para diagnostico o tratamiento, tenga a bien consultar con su medico de cabecera.

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