Article Translations: (English)
Cuando creía que dormir por la noche era un sueño inalcanzable, su bebé empezará a dormir durante períodos más largos por la noche. El ciclo de sueño de su bebé se está empezando a parecer al suyo, y es posible que su pequeño se alimente menos a menudo por la noche.
Pero no dé por sentado todavía que usted podrá dormir a pierna suelta. En esta etapa, "dormir toda la noche de un tirón" se considera dormir solo cinco o seis horas seguidas.
Puesto que los bebés de esta edad están más despiertos, más alerta y más atentos a lo que los rodea durante las horas de luz, es más probable que estén más cansados por la noche y se duerman. Pero sigue habiendo una gran variabilidad dentro de lo que se considera normal.
Según la Fundación Nacional del Sueño de EE.UU. (NSF, por sus siglas en inglés), los bebés de hasta 3 meses de edad deben dormir de 14 a 17 horas cada período de 24 horas. Muchos ya habrán establecido una rutina de sueño diaria de dos o tres siestas al día, seguidas de un "dormir toda la noche de un tirón" después de la última toma.
La Academia Americana de Pediatría (AAP) recomienda compartir la habitación con el bebé sin compartir la cama con él durante, por lo menos, sus primeros seis meses de vida o, idealmente, hasta su primer cumpleaños. Esta es la etapa en que el riesgo de síndrome de muerte súbita del lactante (SMSL) es más alto.
Compartir la habitación con el bebé consiste en acostar al bebé en una cuna, cunita portátil o moisés dentro de la habitación de sus padres, en vez de dejarlo dormir en una habitación independiente. Esto permite tener al bebé cerca por la noche y facilita las tomas, así como la posibilidad de consolarlo y de supervisarlo por la noche.
Aunque compartir la habitación con el bebé es seguro, poner al bebé a dormir en la cama junto a usted no lo es. Compartir la cama con un bebé aumenta el riesgo de SMSL y de otras muertes relacionadas con la conducta de dormir.
Siga las siguientes recomendaciones para que el ambiente de su pequeño para dormir sea seguro:
Si aún no lo ha hecho, inicie una rutina para acostar a su bebé por la noche, que a su pequeño le acabará resultando familiar y relajante. Bañarlo, leerle y cantarle puede tranquilizar a un bebé y señalarle el final del día. A algunos bebés les gusta que los envuelvan en una sábana o mantita ligera, algo que se puede hacer hasta que empiezan a girar sobre sí mismos, o darse la vuelta desde la posición de estar acostado. Si siempre hace esto su bebé pronto asociará estos pasos a la conducta de dormir.
Si mece a su bebé para que se duerma antes de ponerlo en la cuna, es posible que él espere que lo meza para poder conciliar el sueño cada vez que se despierte por la noche. En lugar de hacer eso, intente dejar al bebé en la cuna o el moisés mientras está somnoliento pero aún despierto. De este modo, su bebé aprenderá a quedarse dormido solo.
Algunos bebés se retuercen, gimotean y hasta lloran un poco antes de volverse a quedar dormidos por sí solos. A menos de que crea que su bebé tiene hambre o está enfermo, intente ver qué ocurre si lo deja solo durante unos pocos minutos; es posible que sea capaz de tranquilizarse solo.
Si su bebé se despierta durante el período en que usted quiere que duerma, mantenga la actividad al mínimo. Intente mantener las luces en penumbra y resístase al deseo de hablar o jugar con él. Cambie o alimente a su bebé y vuélvalo a dejar en su cuna o moisés.
Si su bebé se está despertando temprano por la mañana para comer, unos pequeños cambios podrían permitirle modificar ligeramente su horario. Puede intentar despertar a su bebé para su última toma a una hora que se adapte al ritmo de sueño que tiene usted:
Tal vez tarde unas cuantas noches en establecer esta nueva rutina pero, si la aplica de manera constante mejorará sus probabilidades de éxito.
Algunos bebs de esta edad ya empiezan a dormir de un tirón por la noche, pero sigue habiendo una gran variabilidad dentro de lo que se considera normal. Si hay algo que le preocupa sobre el sueño de su bebé, hable con su médico.
Nota: Toda la informacion incluida en este material tiene propositos educacionales solamente. Si necesita servicios para diagnostico o tratamiento, tenga a bien consultar con su medico de cabecera.
© 1995-2024 KidsHealth ® Todos los derechos reservados. Imagenes proporcionadas por iStock, Getty Images, Corbis, Veer, Science Photo Library, Science Source Images, Shutterstock, y Clipart.com