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También recibe el nombre de: síndrome alfa-gal, alergia alfa-gal, alergia a la carne por picadura de garrapata, alergia a la carne de mamífero
La alergia a la carne roja es una alergia alimentaria que puede ocurrir tras la picadura de una garrapata. Algunas garrapatas trasmiten una diminuta partícula llamada alfa-gal a la sangre. Esto puede hacer que el sistema inmunitario de una persona reaccione de forma exagerada a las proteínas de la carne roja y a los productos elaborados con animales mamíferos. El cuerpo interpreta que esas proteínas son invasores dañinos, por lo que intenta combatirlos. Esto puede causar una reacción alérgica.
Una reacción alérgica a la carne roja y a los productos elaborados con mamíferos puede desencadenarse al comer o beber cosas que contengan alfa-gal, como:
Tomar medicamentos recubiertos de gelatina también puede desencadenar una reacción alérgica.
Algunas personas alérgicas a la carne roja deben evitar los productos cárnicos, pero no tienen problemas en consumir otros productos que contengan una menor cantidad de alfa-gal. Hay otras personas que necesitan evitar cualquier cosa que contenga hasta una cantidad ínfima de alfa-gal.
Cuando una persona alérgica a la carne roja come carne roja o algo elaborado con mamíferos, su cuerpo libera sustancias químicas como histamina. Esto puede causar que sus síntomas comiencen entre 2 y 6 horas después, como:
Los niños alérgicos no siempre tienen una reacción cuando comen carne roja o algo elaborado con mamíferos. Pero si la tienen, sus reacciones pueden variar. Algunas reacciones son leves y afectan a una sola parte del cuerpo (como una urticaria en la piel). Pero la siguiente reacción puede ser grave, y recibirá el nombre de anafilaxia. La anafilaxia puede empezar con algunos de los síntomas propios de una reacción alérgica menos grave, pero empeora rápidamente. Los niños pueden tener dificultades para respirar o llegarse a desmayar. En una anafilaxia, siempre está afectada más de una parte del cuerpo. Las anafilaxias que no se tratan pueden ser de riesgo vital.
Si cree que su hijo puede ser alérgico a la carne roja, consulte a su médico. Le preguntarán por sus síntomas y es posible que lo exploren y que le pidan análisis de sangre. Es posible que su hijo necesite visitar a un alergólogo, que le puede hacer más pruebas para comprobar si es alérgico y hablar sobre lo que debería evitar.
Si alguien tiene alergia a la carne roja, es probable que el alergólogo le recete un medicamento llamado autoinyector de adrenalina (o epinefrina). Es fácil de usar, y se utiliza ante la reacciones graves. Haga que su hijo lleve siempre encima dos autoinyectores. Algunas reacciones alérgicas requerirán ambas inyecciones.
Si su hijo empieza a tener síntomas de una reacción alérgica grave, como dificultades para respirar, use el autoinyector de adrenalina de inmediato. Póngaselo también si los síntomas que presenta su hijo afectan a más de una parte del cuerpo, como urticaria sumada a vómitos. A continuación, llame al 911 para pedir una ambulancia a fin de que atiendan a tu hijo de camino a un servicio de urgencias médicas. Esta atención médica es necesaria porque podría haber una segunda oleada de síntomas graves.
Si su hijo es alérgico a la carne roja:
A veces, una persona puede desarrollar una alergia a la carne roja sin haber sido picada por una garrapata, aunque esto no sea frecuente. Además, las personas alérgicas a la carne roja pueden volverse más sensibles si les pica más de una garrapata. Para garantizar la seguridad de su familia, protéjala de las garrapatas, lleven manga larga y pantalones largos cuando salgan de excursión, manténgase en el centro de los senderos y comprueben si llevan garrapatas cuando vuelvan a casa.
Los síntomas de la alergia a la carne roja se pueden aliviar con el tiempo o desaparecer por completo. Por lo tanto, es posible que una persona alérgica pueda volver a comer carne roja y productos derivados de los mamíferos al cabo de unos años.
Obtenga más información sobre cómo gestionar las alergias alimentarias en:
Nota: Toda la informacion incluida en este material tiene propositos educacionales solamente. Si necesita servicios para diagnostico o tratamiento, tenga a bien consultar con su medico de cabecera.
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